Según un estudio realizado por la Asociación Chilena de Médicos Naturistas, las verduras deshidratadas más solicitadas por los médicos naturistas en Chile son las siguientes:
- Espinacas: Son ricas en hierro, calcio, vitaminas A y C, y fibra. Ayudan a fortalecer el sistema inmunológico, prevenir la anemia y mejorar la digestión.
- Zanahorias: Son ricas en betacaroteno, vitamina A, vitamina C y potasio. Ayudan a mejorar la visión, la salud de la piel y el sistema inmunológico.
- Cebollas: Son ricas en quercetina, un flavonoide con propiedades antiinflamatorias y antioxidantes. Ayudan a prevenir enfermedades cardíacas, cáncer y enfermedades respiratorias.
- Ajo: Es rico en alicina, un compuesto con propiedades antibacterianas, antivirales y antiinflamatorias. Ayuda a prevenir enfermedades cardíacas, cáncer y enfermedades respiratorias.
- Tomates: Son ricos en licopeno, un antioxidante que ayuda a proteger las células del daño. Ayudan a prevenir enfermedades cardíacas, cáncer y enfermedades oculares.
Las verduras deshidratadas son una excelente forma de consumir, ya que conservan sus nutrientes y son fáciles de transportar y almacenar. Además, son una opción saludable para quienes tienen dificultades para masticar o tragar alimentos crudos.
Los médicos naturistas recomiendan consumir verduras deshidratadas como parte de una dieta equilibrada y saludable. Pueden ser consumidas en ensaladas, sopas, guisos o como ingrediente de otros platos.
A continuación, se presentan algunos consejos para consumir verduras deshidratadas:
- Elija verduras deshidratadas de buena calidad, que no contengan azúcares añadidos ni conservantes.
- Almacene las verduras deshidratadas en un lugar fresco y seco.
- Lave las verduras deshidratadas antes de consumirlas.
- Remoje las verduras deshidratadas durante 10-15 minutos antes de consumirlas
En @ecohierbaschile, nos hemos puesto como desafío el impulsar que los alimentos naturales (no procesados) y deshidratados, al igual que las hierbitas, son vitales de incorporar en nuestra alimentación Asimismo, traspasar a nuestras familias, hijos que su consumo habitual nos aporta nutrientes y la energía necesaria que cada uno necesita para mantenerse sano.
Por esta razón, creemos firmemente que el deshidratar es un arte, agregamos valor al utilizar energías limpias y evitamos que estos alimentos que por forma o color vayan a parar directo a vertederos y que luego se pudran.